Un año más hemos celebrado este día, en el que se pone de manifiesto la importancia de una convivencia pacífica.
En esta ocasión la celebración ha consistido en un acto simbólico de construcción de la paz.
Cada uno hemos aportado nuestro «ladrillo» y entre todos hemos levantado una pared. Una pared que hemos de seguir construyendo día a día y acercarnos así a un mundo de PAZ.
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